1. Llevá la ralladura de limón, el azúcar, la manzanilla, la cúrcuma, la sal y 2 tazas de agua, preferiblemente filtrada, a fuego medio en una cacerola pequeña hasta que hierva suavemente, revolviendo hasta que el azúcar se disuelva. Retirá del fuego, tapá y dejá reposar durante 30 minutos. Colá el jarabe a través de un tamiz fino en una cacerola grande; desecha los sólidos. 2. Añadí los mangos, los duraznos y el jengibre al jarabe. Llevá a hervir suavemente a fuego medio y cociná hasta que la fruta esté casi blanda, unos 20 minutos. Retirá del fuego y dejá reposar hasta que la fruta esté muy suave, unos 30 minutos. 3. Transferí la mezcla a una licuadora; licua hasta que esté suave. Colá nuevamente a través de un tamiz fino en la cacerola y agrega el vinagre y la vainilla. Exprimí el jugo de los medios limones y revolvé nuevamente para combinar. TIP! El jarabe de frutas se puede hacer con 3 semanas de anticipación. Transferí a un recipiente hermético, cubrí y refrigerá, o congelá hasta 2 meses.